La educación en positivo del perro pretende favorecer los comportamientos adecuados del animal, al premiarlos con estímulos positivos, como comida, caricias y felicitaciones verbales. Con este tipo de entrenamiento se evitan traumas derivados de los castigos, que suelen desencadenar frustraciones y tensiones.
El programa de entrenamiento, lo llevan a cabo educadores profesionales y se trabajan los siguientes aspectos:
- Desarrollo del vínculo de las personas con sus perros
- Adquisición de las habilidades de obediencia básica: sentarse, tumbarse, caminar sin tirar de la correa, que acuda a nuestra llamada, permanecer quieto…
- Detección y/o prevención de problemas de comportamiento
- Socialización y habituación a la presencia o interacción con otros perros, personas, estímulos externos…
- En caso de cachorros, se trabaja además la adquisición de normas y rutinas de higiene, inhibición de la mordida, y prevención derivada de situaciones en las que el perro debe permanecer solo.
Modalidades para el adiestramiento:
- Adiestramiento a domicilio
- Grupos de cachorros